6 de junio de 2015

Eliminar malos olores de tu hogar con un ozonizador

Las nuevas tecnologías nos traen un sinfín de soluciones para que el espacio doméstico sea más habitable y resulte un lugar donde se respire salud y se sienta un gran confort. En cuanto al aire interior, encontramos tecnologías de gran efectividad, como los rayos ultravioleta o la ionización, pero la tecnología del ozono será la idónea si nuestro objetivo es tener un hogar libre de malos olores.

Afortunadamente, además, será muy sencillo aprovechar la tecnología del ozono a la hora de eliminar malos olores de tu hogar con un ozonizador, puesto que son aparatos diseñados para la usabilidad. Ello significa, fundamentalmente, que son aparatos de funcionamiento prácticamente automatizado, por lo común utilizando un temporizador que nos servirá tanto para poder finalizar el tratamiento como para realizar actuaciones regulares.

A la hora de eliminar malos olores un ozonizador de aire estándar o un ozonizador mixto, de aire y agua serán de gran ayuda para aprovechar el ozono bien diluido en aire o en agua. De una u otra forma, según sea más conveniente, conseguiremos resultados inmejorables mediante la ozonización del aire o con el lavado de superficies, tejidos u objetos, incluyendo tratamientos que acaben con olores de cañerías, olores de humedades y demás.

El ozono inyectado en el aire también puede aplicarse para realizar un lavado en seco que será tremendamente práctico para higienizar aquellas superficies que no deseemos o no podamos mojar, como cortinas, alfombras, tapizados, colchas, peluches, abrigos y, en fin, cualquier otra superficie que queramos desodorizar y desinfectar con todo el cuidado y mimo.

También podemos optar por los ozonizadores específicos, como los ozonizadores de calzado, ceniceros ozonizadores, ozonizador de nevera o, por ejemplo, el  cubo de basura ozonizador. Idealmente, los utilizaremos de forma complementaria.

El ozono nos permite llevar a cabo un tratamiento de desinfección y desodorización de forma simultánea, por lo que eliminar malos olores significa a su vez acabar con suciedad y polución que acompañan a las pestilencias. Con su aplicación, por lo tanto, estamos atacando la raíz de los olores, lo que nos asegura una erradicación definitiva. 

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